La Comisión Europea expone en consulta pública la necesidad de un marco regulatorio europeo para los criptoactivos

La Comisión Europea ha publicado una consulta pública para evaluar la creación de un marco normativo para los criptoactivos.

El objetivo de ese marco es dar respuesta a la falta de seguridad jurídica  actual de la que adolece el tratamiento de los criptoactivos. Por lo tanto, se trata de  determinar si el marco regulatorio de los servicios financieros de la UE le es aplicable y cómo, y si aborda adecuadamente los riesgos inherentes a estos activos y a los servicios financieros relacionados con ellos.

Ámbito de la consulta pública

En particular, la consulta quiere evaluar:

• hasta qué punto los activos criptográficos están o pueden estar cubiertos por la regulación actual de la UE;
• si se necesita una nueva regulación para este ámbito;
• si sería suficiente emitir directrices de aplicación.

Líneas de trabajo de la Comisión

La Comisión está siguiendo dos líneas paralelas de trabajo:

Sobre los criptoactivos cubiertos por el marco regulatorio de la UE

Se entiende que unos criptoactivos estarían cubiertos hoy por el marco regulatorio de los servicios financieros de la UE.

Son los considerados instrumentos financieros o dinero electrónico (de conformidad con los documentos publicados por la ESMA y la EBA).

En relación con este grupo, los objetivos de la iniciativa son:

1. Aclarar la forma y conciliación en la que el marco actual se aplica a estos criptoactivos.
2. Adaptar la normativa a las características técnicas necesarias para conseguir que las autoridades nacionales competentes puedan aplicar la norma.
3. Conseguir que la legislación vigente no impida la aplicación de determinadas tecnologías y que aborde eficazmente los riesgos operacionales inherentes a ellas.

Sobre los criptoactivos fuera de la regulación de la UE

Respecto a los criptoactivos que, por sus características, quedarían fuera de los conceptos previstos y, por tanto, del encaje de la regulación actual de la UE, se pretende lo siguiente:

1. Revertir, en la medida de lo posible, los riesgos de consumidores e inversores debido a la ausencia de normas aplicables.
2. Valorar la categorización de estos criptoactivos en una nueva clase de «activos regulados».
3. Mitigar la falta de comprensión de los consumidores para minimizar el riesgo de fraude.
4. Abordar el riesgo que suponen las «criptomonedas estables» o «stablecoins» para la estabilidad financiera.

Además de lo anterior, la Comisión considera que un marco normativo para los criptoactivos sería positivo en los ámbitos económicos, sociales, ambientales, así como en los derechos fundamentales y en la simplificación de las cargas administrativas.

El periodo de la consulta es del 19-12-2019 al 12-3-2020, y la decisión de la  Comisión está prevista para el tercer trimestre de 2020.